La Mejor Forma de Cultivar Ajo y Jengibre en Tu Jardín

Cultivar ajo y jengibre en casa no solo es una forma efectiva de tener estos ingredientes frescos a mano, sino que también es una actividad gratificante y entretenida. Tanto el ajo como el jengibre son esenciales en muchas cocinas y ofrecen numerosos beneficios para la salud. A continuación, te mostramos cómo hacer crecer estas deliciosas plantas de manera efectiva.

Cómo Cultivar Ajo

El ajo es una planta resistente que se puede cultivar fácilmente en casa. Sigue estos pasos para asegurar una cosecha abundante y saludable.

1. Elegir las Semillas de Ajo

Los “semilleros” de ajo son en realidad los dientes individuales que provienen de un bulbo. Puedes adquirir dientes de ajo en un vivero, pero también puedes usar dientes sanos que hayas comprado en el supermercado. Es importante no separar los dientes del bulbo hasta que estés listo para plantarlos, ya que esto puede afectar su viabilidad.

2. Cuándo Plantar el Ajo

El momento ideal para plantar ajo es durante el otoño, ya que las raíces se desarrollan antes de que llegue el frío. Sin embargo, si el clima en tu área es cálido, también puedes plantar en primavera. En climas extremadamente suaves, la siembra puede realizarse durante todo el año.

3. Preparar el Suelo

Escoge un lugar en tu jardín que reciba luz solar directa y que tenga un buen drenaje. Asegúrate de que la tierra contenga suficiente compost para enriquecerla. Esto no solo proporcionará nutrientes, sino que también mejorará la textura del suelo.

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4. Plantar los Dientes de Ajo

Arranca cuidadosamente los dientes exteriores del bulbo de ajo. Plántalos a una profundidad de 5 a 8 centímetros, asegurándote de que la punta del diente esté mirando hacia arriba. Coloca los dientes a una distancia de 7 a 12 centímetros entre sí para darles espacio a crecer.

5. Cuidado del Ajo

Una vez plantados, riégales bien y cúbrelos con aproximadamente 15 centímetros de multitud, como paja. Este acolchado ayudará a conservar la humedad y protegerá el suelo. Mantén el suelo constantemente húmedo, pero evita el exceso de riego. Cuando las hojas verdes comiencen a volverse marrones, disminuye el riego, ya que esto es una señal de que las plantas están listas para ser cosechadas.

6. Cosecha

Puedes cosechar ajo en cualquier momento después de que las hojas se vuelvan marrones. Simplemente desentiérralo con cuidado, asegurándote de no dañar los bulbos.

Cómo Cultivar Jengibre

Cultivar jengibre es otra excelente opción para el jardín, aunque requiere un poco más de atención. Sigue estos pasos para cultivar una cosecha exitosa de jengibre.

1. Seleccionar los Rhizomas de Jengibre

El jengibre se cultiva a partir de rhizomas (raíces) que puedes adquirir en un mercado o un vivero. Busca rhizomas que tengan “ojos” visibles, que son pequeños brotes que se asemejan a cuernos. Antes de plantar, remoja estos rhizomas en agua fresca durante toda la noche para estimular el crecimiento.

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2. Cuándo Plantar el Jengibre

El mejor momento para plantar jengibre es a finales del invierno o a principios de la primavera, cuando el suelo está tibio. Siembra los rhizomas a una profundidad de 7 a 10 centímetros, asegurándote de que los ojos estén orientados hacia arriba.

3. Distribución de los Rhizomas

Si lo deseas, puedes dividir los rhizomas en secciones más pequeñas, asegurándote de que cada pieza tenga al menos un ojo. Coloca los rhizomas a una distancia de 10 centímetros entre sí para permitir suficiente espacio para crecer.

4. Cuidados del Jengibre

El jengibre prospera en un sitio resguardado con luz solar filtrada. Mantén el suelo constantemente húmedo, pero evita el encharcamiento. Durante períodos secos, rocía las plantas con agua para mantener la humedad. El jengibre crece lentamente y generalmente está listo para la cosecha a finales del verano.

5. Cosecha del Jengibre

Cuando las hojas de la planta comiencen a morir, es el momento de reducir el riego y permitir que el suelo se seque un poco. Esto ayudará a que se formen más rhizomas. Una vez que todas las

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