Burrata con Tomates Cherry Asados y Pan Crujiente: Receta Mediterránea Irresistible
La burrata se ha consolidado como uno de los quesos más apreciados en la gastronomía mediterránea. Su textura cremosa y su sabor delicado la convierten en el ingrediente perfecto para platos frescos, elegantes y fáciles de preparar. Acompañada de tomates cherry asados, pan crujiente y albahaca fresca, esta receta combina sencillez y sofisticación, ideal tanto para un aperitivo como para una cena ligera.
En este artículo descubrirás cómo preparar la burrata con tomates cherry asados y pan crujiente de manera original, consejos para realzar su sabor, variaciones gourmet y todo lo que necesitas saber para disfrutar de este clásico.
Ingredientes necesarios
- 1 burrata fresca de buena calidad
- 300 g de tomates cherry
- 2–3 rebanadas de pan rústico o baguette
- 2–3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 diente de ajo
- Hojas frescas de albahaca al gusto
- Sal marina y pimienta negra recién molida
- Una pizca de orégano seco o hierbas italianas (opcional)
Preparación paso a paso
1. Asar los tomates
Precalienta el horno a 200 °C. Coloca los tomates cherry en una bandeja, añade un chorrito de aceite de oliva, sal, pimienta y, si lo prefieres, una pizca de orégano seco. Hornea durante 15–20 minutos hasta que los tomates estén tiernos y ligeramente caramelizados.
2. Tostar el pan
Corta las rebanadas de pan y dóralas en una sartén con un poco de aceite de oliva. Para intensificar el sabor, frota cada rebanada con un diente de ajo mientras aún están calientes.
3. Montar el plato
Coloca la burrata en el centro de un plato amplio. Distribuye alrededor los tomates asados y las rebanadas de pan.
4. Aliñar
Rocía la burrata con un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Agrega sal y pimienta negra recién molida al gusto.
5. Finalizar
Decora con hojas de albahaca fresca y sirve de inmediato para disfrutar de la burrata en su punto óptimo de cremosidad.

Beneficios nutricionales de la burrata con tomates cherry
Este plato no solo destaca por su atractivo visual y su sabor equilibrado, también es una opción nutritiva y saludable:
- Proteínas de calidad: La burrata aporta proteínas que favorecen el mantenimiento de la masa muscular.
- Grasas saludables: El aceite de oliva virgen extra es fuente de ácidos grasos monoinsaturados beneficiosos para el corazón.
- Antioxidantes: Los tomates cherry son ricos en licopeno, un antioxidante que contribuye a la salud celular.
- Vitaminas frescas: La albahaca ofrece compuestos antiinflamatorios y un aporte de vitamina K.
Variaciones gourmet para sorprender
- Con jamón serrano: Añade unas lonchas finas alrededor de la burrata para un contraste salado y elegante.
- Con pesto casero: Sustituye parte del aliño de aceite por una cucharada de pesto fresco para intensificar los sabores mediterráneos.
- Con verduras asadas: Incorpora berenjena o calabacín al horno para enriquecer la receta con más textura y color.
- Versión trufada: Unas gotas de aceite de trufa sobre la burrata elevan el plato a un nivel gourmet.
Consejos prácticos
- Saca la burrata del frigorífico 15 minutos antes de servirla para que su interior esté más cremoso.
- Utiliza pan de masa madre para un acompañamiento más crujiente y con mejor sabor.
- Sirve el plato inmediatamente después de montarlo para mantener la frescura de los ingredientes.
Ideas de presentación
Esta receta es perfecta para compartir como entrante en cenas familiares, como parte de una mesa de tapas mediterráneas o incluso como plato principal acompañado de una ensalada ligera. También funciona muy bien en celebraciones informales, ya que combina elegancia y sencillez en un solo plato.
Preguntas frecuentes
¿Qué diferencia hay entre burrata y mozzarella?
La mozzarella es un queso fresco de pasta hilada, mientras que la burrata tiene un interior cremoso de stracciatella y nata, lo que le da una textura más suave y untuosa.
¿Se puede preparar con tomates crudos?
Sí, pero los tomates asados realzan el dulzor natural y aportan un sabor más intenso al conjunto.
¿Cómo conservar la burrata si no se consume de inmediato?
Debe mantenerse en su líquido de conservación, en el frigorífico, y consumirse en un máximo de 2–3 días tras la compra.
¿Qué vino acompaña mejor este plato?
Un vino blanco fresco como un Sauvignon Blanc o un rosado ligero son excelentes opciones para acompañar la burrata con tomates cherry.
¿Es un plato apto para vegetarianos?
Sí, siempre que la burrata utilizada no contenga cuajo animal, lo que se puede verificar en el etiquetado.