Estofado de carne con patatas y guisantes: receta tradicional y nutritiva
El estofado de carne con patatas y guisantes es un plato clásico de la cocina casera que nunca pasa de moda. Su combinación de ingredientes sencillos, sabor profundo y textura reconfortante lo convierten en una opción ideal para comidas familiares, días fríos o celebraciones en las que se busca un guiso sabroso y completo.
Esta receta destaca por su versatilidad, ya que puede adaptarse con diferentes tipos de carne, añadir más verduras o incluso prepararse sin vino para una versión más ligera. A continuación, aprenderás cómo elaborar un estofado casero perfecto paso a paso.
Ingredientes principales
- 600 g de carne de ternera para guisar, cortada en cubos
- 400 g de patatas pequeñas o patatas medianas troceadas
- 2 zanahorias en rodajas
- 150 g de guisantes frescos o congelados
- 1 cebolla grande picada
- 2 dientes de ajo picados
- 2 ramas de apio en trozos
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 200 ml de vino tinto (opcional)
- 500 ml de caldo de carne o verduras
- 2 hojas de laurel
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Sal y pimienta al gusto
- Perejil fresco picado para decorar
Preparación paso a paso
1. Sellar la carne
En una cazuela amplia, calienta el aceite de oliva y dora los cubos de carne por todos los lados hasta que tomen un color dorado uniforme. Retira la carne y resérvala.
2. Sofrito de base
En la misma cazuela, incorpora la cebolla, el ajo, el apio y las zanahorias. Cocina a fuego medio durante unos minutos hasta que se ablanden ligeramente. Añade el pimentón dulce y mezcla bien para potenciar el sabor.
3. Desglasar con vino
Vierte el vino tinto y deja que se reduzca durante unos minutos para que se evapore el alcohol. Este paso es opcional, pero realza el gusto y aporta mayor intensidad al guiso.
4. Cocción lenta del estofado
Devuelve la carne a la cazuela e incorpora el caldo junto con las hojas de laurel. Tapa y deja cocinar a fuego lento durante unos 45 minutos, o hasta que la carne esté tierna y jugosa.
5. Añadir las patatas
Agrega las patatas troceadas y continúa la cocción durante 20 minutos más, verificando que estén tiernas pero sin deshacerse.
6. Incorporar los guisantes
Añade los guisantes frescos o congelados y cocina 5 minutos adicionales. Ajusta de sal y pimienta antes de apagar el fuego.
7. Servir
Presenta el estofado en platos hondos, espolvoreando perejil fresco picado por encima. Lo ideal es acompañarlo con pan artesanal para disfrutar de la salsa.
Consejos para un estofado perfecto
- Si buscas un sabor más intenso, utiliza caldo de carne casero en lugar de caldo envasado.
- Para una versión más ligera, reduce la cantidad de aceite y sustituye parte de la carne por verduras adicionales como calabacín o champiñones.
- El vino puede reemplazarse por un chorrito de zumo de uva o eliminarse sin afectar la textura del guiso.
- Este plato sabe aún mejor al día siguiente, ya que los sabores se integran con el reposo.
Beneficios del estofado de carne
Este guiso aporta proteínas de alta calidad gracias a la carne, carbohidratos complejos de las patatas y fibra, vitaminas y minerales de las verduras. Su equilibrio nutricional lo convierte en un plato completo y saciante. Preparado con ingredientes frescos y aceite de oliva, es una alternativa saludable dentro de la cocina mediterránea.
Preguntas frecuentes
¿Qué tipo de carne es mejor para el estofado?
Se recomienda carne de ternera para guisar, como aguja o jarrete, porque se ablanda durante la cocción lenta y resulta jugosa.
¿Puedo preparar el estofado con otra carne?
Sí, puedes utilizar pollo, cerdo o incluso cordero, ajustando los tiempos de cocción según el tipo de carne.
¿Es posible hacerlo en olla exprés?
Sí, en una olla a presión el tiempo de cocción se reduce a la mitad, lo que permite preparar el estofado de forma más rápida.
¿Cómo puedo espesar la salsa?
Si prefieres una salsa más densa, aplasta un par de patatas dentro del guiso o añade una cucharadita de harina antes de verter el caldo.
¿Se puede congelar el estofado?
Sí, se congela muy bien en recipientes herméticos. Para recalentar, lo mejor es hacerlo a fuego lento para mantener la textura original.
