Crepas de chocolate con fresas: receta fácil, consejos y variantes
Las crepas de chocolate con fresas son un clásico irresistible que combina la suavidad de una masa ligera con el contraste de un relleno dulce y fresco. Este postre es perfecto para ocasiones especiales, aunque también puede convertirse en una merienda rápida o en el cierre de un almuerzo familiar. Prepararlas en casa no requiere experiencia avanzada en repostería, y con unos cuantos trucos podrás conseguir un resultado profesional.
Ingredientes para aproximadamente 10 crepas
- 250 g de harina de trigo
- 3 huevos
- 50 g de azúcar
- 50 g de mantequilla derretida
- 500 ml de leche
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
Para la cobertura y decoración
- 150 g de chocolate negro o con leche (fundido)
- Fresas frescas
- Azúcar glas
Preparación paso a paso
1. Elaborar la masa
Coloca la harina en un bol grande junto con el azúcar y la pizca de sal. Haz un hueco en el centro y añade los huevos uno por uno. Incorpora la leche poco a poco, mezclando con un batidor para evitar grumos. Agrega el extracto de vainilla y la mantequilla derretida. Deja reposar la mezcla durante 30 minutos a temperatura ambiente.
2. Cocinar las crepas
Calienta una sartén antiadherente con un poco de mantequilla. Vierte una pequeña cantidad de masa y distribúyela por toda la superficie. Cocina aproximadamente 1 minuto por cada lado, hasta que esté dorada y fina. Repite el proceso hasta terminar con toda la masa.
3. Preparar la cobertura
Funde el chocolate a baño maría o en microondas a baja potencia, removiendo hasta que quede cremoso. Lava las fresas y córtalas en láminas o trozos según prefieras.
4. Montaje final
Dobla las crepas en forma de triángulo o enrolladas, vierte por encima el chocolate fundido y coloca las fresas frescas. Espolvorea con azúcar glas antes de servir.

Consejos para un mejor resultado
- Si quieres una textura más ligera, sustituye parte de la leche por leche de almendras o avena.
- Para intensificar el sabor, añade ralladura de naranja o unas gotas de licor en la masa.
- Si prefieres una opción más saludable, usa chocolate con un 70 % de cacao y reduce la cantidad de azúcar en la mezcla.
- Las crepas se pueden preparar con antelación y guardar en la nevera, separadas con papel vegetal para que no se peguen.
Variantes deliciosas
- Versión sin gluten: sustituye la harina de trigo por harina de arroz o mezclas especiales para repostería sin gluten.
- Crepas saladas para brunch: elimina el azúcar de la receta y rellena con queso, espinacas, jamón o champiñones.
- Estilo fitness: prepara la masa con leche vegetal, endulzante natural y acompaña con fresas frescas sin azúcar añadido.
Beneficios de preparar crepas caseras
Hacer crepas en casa te permite controlar la calidad de los ingredientes, reduciendo azúcares y grasas en comparación con las versiones comerciales. Además, son muy versátiles: se pueden rellenar tanto con ingredientes dulces como salados. Las fresas aportan vitamina C y antioxidantes, mientras que el chocolate negro ofrece flavonoides beneficiosos para la salud cardiovascular, según Mayo Clinic.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Puedo preparar la masa el día anterior?
Sí, puedes guardarla en el refrigerador hasta 24 horas. Antes de usarla, mezcla ligeramente para recuperar la textura original.
¿Qué tipo de chocolate es mejor?
El chocolate negro con al menos un 60 % de cacao aporta un sabor más intenso y menos azúcares añadidos. Si prefieres un resultado más suave, opta por chocolate con leche.
¿Se pueden congelar las crepas?
Sí, colócalas apiladas con papel de horno entre cada una y guárdalas en bolsas herméticas. Para consumirlas, solo recaliéntalas en una sartén o microondas.
¿Cómo evitar que las crepas se peguen?
Asegúrate de usar una sartén antiadherente y engrásala ligeramente con mantequilla antes de cada tanda. Una masa demasiado espesa también puede dificultar el proceso, por lo que conviene revisar la consistencia.
¿Qué otros rellenos combinan bien con las crepas?
Además de fresas y chocolate, puedes añadir plátano, crema pastelera, mermeladas caseras, nata montada o frutos secos.