Fabada Asturiana: el guiso tradicional de Asturias que conquista con su sabor casero

La Fabada Asturiana es uno de los platos más emblemáticos del norte de España. Este guiso de fabes (judías blancas) combina legumbres tiernas con embutidos típicos como el chorizo y la morcilla, creando un sabor intenso y reconfortante. Es una receta ideal para los días fríos, perfecta para compartir en familia y disfrutar del auténtico espíritu de la cocina asturiana.

Origen y tradición de la Fabada Asturiana

Este plato tiene sus raíces en la región de Asturias, donde el clima fresco y húmedo favorece la producción de fabes de gran calidad. La fabada nació como una comida humilde, preparada por campesinos con ingredientes locales: legumbres, carnes curadas y embutidos. Con el tiempo, se convirtió en un símbolo de la gastronomía asturiana y en una receta reconocida en toda España.

Hoy en día, la Fabada Asturiana sigue siendo sinónimo de hospitalidad, tradición y sabor auténtico.

Ingredientes necesarios para preparar Fabada Asturiana (4 a 6 porciones)

• 500 g de fabes secas (judías blancas tipo cannellini o alubias grandes)
• 1 chorizo asturiano
• 1 morcilla asturiana
• 200 g de panceta salada o tocino de cerdo
• 1 hueso de jamón (opcional, para intensificar el sabor)
• 1 cebolla mediana
• 2 dientes de ajo
• 1 hoja de laurel
• 1 cucharadita de pimentón dulce (preferiblemente de La Vera)
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal al gusto
• Perejil fresco para decorar

Preparación paso a paso

1. Remojar las fabes

La noche anterior, coloca las fabes en un recipiente grande y cúbrelas con agua fría. Déjalas en remojo durante al menos 12 horas. Este paso es esencial para que las legumbres se hidraten y se cocinen uniformemente.

2. Montar la base del guiso

Escurre las fabes y colócalas en una olla grande junto con el chorizo, la morcilla, la panceta y el hueso de jamón. Añade agua fría suficiente para cubrir todos los ingredientes.

3. Cocción lenta

Lleva la olla a ebullición a fuego medio. Cuando comience a hervir, baja el fuego y deja cocinar lentamente durante unas 2 horas. Durante la cocción, retira la espuma que se forme en la superficie.
Si el agua se evapora demasiado, agrega más agua caliente. Evita remover con una cuchara para no romper las fabes; en su lugar, mueve la olla con cuidado.

4. Incorporar el sofrito aromático

En una sartén aparte, sofríe la cebolla y el ajo picados en un chorrito de aceite de oliva hasta que estén dorados. Añade el pimentón dulce, remueve rápidamente y vierte este sofrito sobre el guiso. Agrega la hoja de laurel y continúa la cocción a fuego bajo durante unos 30 minutos más.

5. Ajustar el sabor y finalizar

Añade sal solo al final de la cocción para evitar que las fabes se endurezcan. Cuando el guiso esté espeso y los embutidos bien cocidos, apaga el fuego y deja reposar la fabada unos 30 minutos antes de servir.

6. Servir y disfrutar

Sirve caliente, espolvoreando con un poco de perejil fresco picado. Este plato mejora su sabor si se prepara con antelación y se deja reposar, ya que los sabores se intensifican al día siguiente.

Consejos para una Fabada perfecta

• Usa fabes asturianas auténticas si es posible; son más suaves y cremosas.
• No remuevas el guiso con cucharas metálicas para evitar que las legumbres se rompan.
• Acompaña con pan casero o de hogaza, ideal para disfrutar la salsa espesa.
• Si te gusta un toque picante, añade un poco de pimentón picante o una guindilla seca.
• Este plato combina perfectamente con un vino tinto joven o sidra natural asturiana.

Valor nutricional y beneficios

La Fabada Asturiana, aunque es un plato contundente, también tiene beneficios nutricionales. Las fabes aportan proteínas vegetales, hierro y fibra. Los embutidos y carnes curadas añaden sabor y energía, por lo que es ideal como plato único.
Consumida con moderación, dentro de una dieta equilibrada, la fabada puede ser un alimento reconfortante y nutritivo, especialmente durante el invierno.

Variaciones regionales

Aunque la receta tradicional proviene de Asturias, existen variantes en otras regiones de España. En algunas zonas se sustituyen las fabes por otras alubias locales, o se incorporan ingredientes como costillas de cerdo o verduras.
También hay versiones vegetarianas, que conservan el sabor original usando pimentón ahumado, aceite de oliva y caldo vegetal.

Preguntas frecuentes (FAQ)

1. ¿Puedo usar fabes en conserva para hacer fabada?
Sí, aunque las fabes secas ofrecen una textura más cremosa y un sabor más auténtico. Si usas fabes en conserva, reduce el tiempo de cocción y añade los embutidos directamente al caldo.

2. ¿Cómo evito que las fabes se rompan durante la cocción?
El secreto está en no remover el guiso con utensilios, sino mover la olla suavemente. Además, el fuego debe mantenerse bajo y constante.

3. ¿Se puede congelar la Fabada Asturiana?
Sí, se conserva bien en el congelador durante unos tres meses. Asegúrate de enfriarla completamente antes de guardarla.

4. ¿Qué embutidos son indispensables?
El chorizo y la morcilla asturiana son esenciales, junto con la panceta o tocino. Estos ingredientes aportan el sabor característico del plato.

5. ¿Con qué se acompaña tradicionalmente la fabada?
Se sirve con pan rústico y una bebida típica asturiana: la sidra natural. También puede acompañarse con ensalada ligera para equilibrar la comida.