Patatas rellenas con espinacas y queso gratinado
Las patatas rellenas con espinacas y queso gratinado son una preparación casera que combina ingredientes sencillos con un resultado muy reconfortante. Esta receta destaca por su textura cremosa, su sabor suave y la posibilidad de adaptarla a diferentes gustos. Es una alternativa económica, fácil de preparar y perfecta tanto como plato principal como acompañamiento.
Introducción a las patatas rellenas con espinacas y queso
Las patatas rellenas con espinacas y queso gratinado se elaboran horneando primero las patatas hasta que estén tiernas, retirando parte de su interior y mezclándolo con un salteado de espinacas y ajo. Luego se rellenan nuevamente y se cubren con queso para gratinar. Este método permite aprovechar la propia patata como base, conservando su sabor natural y logrando un interior suave con una superficie dorada.
Ingredientes necesarios
3 patatas grandes
2 tazas de espinacas frescas
2 cucharadas de mantequilla
1 diente de ajo picado
150 g de queso mozzarella rallado
50 g de queso parmesano rallado
Sal y pimienta
Aceite de oliva
Preparación paso a paso de las patatas rellenas
Hornear las patatas
Lava las patatas, córtalas a la mitad y colócalas en una bandeja. Añade aceite de oliva, sal y pimienta. Hornéalas a 200°C durante 35 a 45 minutos o hasta que estén completamente tiernas.
Extraer la pulpa
Deja que se enfríen un poco para poder manipularlas. Con una cuchara retira parte de su pulpa interior, dejando una capa suficiente para mantener la forma.
Preparar el relleno
En una sartén derrite la mantequilla y sofríe el ajo. Agrega las espinacas y cocínalas hasta que reduzcan su tamaño. Incorpora un poco de la pulpa de patata para crear un relleno más cremoso. Ajusta la sal y la pimienta.
Rellenar las patatas
Distribuye la mezcla en cada mitad de patata. Añade mozzarella y, si lo deseas, parmesano para intensificar el gratinado.

Gratinar
Coloca nuevamente la bandeja en el horno y gratina durante 10 a 12 minutos o hasta que el queso esté dorado y completamente fundido.
Variaciones de la receta
Las patatas rellenas pueden adaptarse fácilmente a distintos ingredientes sin perder su estructura ni calidad. Algunas opciones incluyen:
Pollo cocido en trozos
Champiñones salteados
Chorizo o jamón en cubos
Crema de leche para un relleno más suave
Quesos como cheddar, gouda o gruyere
Consejos para un mejor resultado
Usa patatas de piel firme para evitar que se rompan al vaciarlas.
Las espinacas frescas aportan un sabor más limpio, pero las congeladas funcionan si se escurren bien.
Evita excederte con los líquidos para que el relleno mantenga su consistencia.
Si deseas un gratinado más intenso, utiliza una mezcla de varios quesos.
Beneficios nutricionales
Esta receta ofrece una combinación equilibrada de carbohidratos, proteínas, fibra y micronutrientes. Las espinacas aportan hierro, potasio y antioxidantes, mientras que los quesos proporcionan calcio y energía. Las patatas rellenas resultan especialmente adecuadas para comidas completas sin necesidad de complicaciones.
Preguntas frecuentes
¿Se pueden preparar con anticipación?
Sí. Puedes hornear y vaciar las patatas antes, mantener el relleno en el refrigerador y gratinarlas justo antes de servir.
¿Pueden hacerse sin lácteos?
Es posible sustituir los quesos por alternativas vegetales y usar aceite de oliva en lugar de mantequilla.
¿Qué tipo de patata es la más adecuada?
Las patatas firmes y alargadas mantienen mejor su estructura al ser vaciadas y rellenadas.
¿Puedo agregar proteínas al relleno?
Sí. Pollo desmenuzado, pavo o garbanzos funcionan muy bien.
¿Cuánto duran en refrigeración?
Pueden conservarse hasta tres días en un recipiente hermético.