¿Cómo podar correctamente tus plantas sin dañarlas?
La poda es una de las prácticas más importantes para mantener las plantas sanas, fuertes y productivas. Sin embargo, no se trata solo de cortar ramas al azar. La forma, el ángulo y el lugar donde realizas el corte marcan la diferencia entre una poda beneficiosa y una que debilita al cultivo. Una mala técnica puede frenar el crecimiento, exponer a enfermedades e incluso reducir la vida de la planta.
A continuación, te mostramos cómo hacer una poda correcta y qué errores debes evitar.
El ángulo correcto del corte
El corte debe hacerse con un ángulo de 45°, siempre un poco inclinado y justo por encima de una yema que mire hacia el exterior. Este detalle es clave porque:
- Permite que el agua escurra sin acumularse sobre la herida.
- Reduce el riesgo de pudrición y enfermedades fúngicas.
- Favorece una cicatrización más rápida y limpia.
De esta manera, la planta cicatriza bien y genera nuevos brotes vigorosos en la dirección deseada.
Errores comunes al podar
Muchas veces, los problemas de salud de las plantas después de la poda provienen de cortes mal hechos. Estos son los fallos más frecuentes:
- Corte demasiado inclinado: provoca una herida excesiva, aumentando la exposición a plagas y enfermedades.
- Corte demasiado cerca de la yema: puede secarla o impedir que se desarrolle el nuevo brote.
- Corte demasiado lejos de la yema: deja un muñón seco que se convierte en un punto de entrada para hongos.
Evitar estos errores asegura que la planta dirija su energía hacia un crecimiento sano y equilibrado.
Recomendaciones agronómicas para una poda exitosa
- Usa herramientas limpias y afiladas: tijeras de podar, serruchos o cuchillos deben desinfectarse antes de cada uso para prevenir contagio de enfermedades.
- Respeta la época adecuada: la mayoría de las especies deben podarse en su reposo vegetativo (final del invierno o comienzo de primavera). En plantas de interior o arbustos ornamentales, revisa las necesidades específicas.
- Aplica selladores en cortes grandes: ayuda a cicatrizar y reduce la entrada de hongos.
- No podes en exceso: retirar demasiadas ramas a la vez debilita la planta y retrasa la producción.
Conclusión
Podar correctamente es mucho más que dar forma a una planta. Una técnica adecuada garantiza un crecimiento equilibrado, una floración abundante y una mayor resistencia a enfermedades. Siguiendo estas recomendaciones simples podrás mantener tu jardín o huerto más saludable y productivo durante todo el año.
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- Sugerencias de enlaces internos (trucosdevida.com):
- “Errores comunes en el cuidado de plantas de interior”
- “Guía práctica para mantener tus herramientas de jardinería en buen estado”
- “Cómo preparar tu jardín para la primavera”
- Sugerencias de enlaces externos:
- FAO sobre prácticas sostenibles de cultivo
- Royal Horticultural Society con guías sobre poda y jardinería
- Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) con recomendaciones sobre manejo de cultivos
