¡DEJA DE COMPRAR CÉLERI EN EL SUPERMERCADO! CULTIVA TU PROPIO CÉLERI EN CASA Y TEN UNA RESERVA INFINITA
¿Eres amante del céleri? Si la respuesta es sí, seguramente sabes que comprarlo en el supermercado puede resultar costoso y, a veces, poco práctico, especialmente si deseas tener siempre disponible una porción fresca y crujiente. La buena noticia es que no necesitas mucho espacio ni experiencia en jardinería para aprender a cultivar tu propio céleri en casa. Con unos pasos sencillos y un poco de paciencia, podrás disfrutar de una reserva de esta deliciosa verdura que está lista para cosechar en cualquier momento.
En esta guía completa, te explicaré cómo empezar desde cero, qué materiales necesitas, y te daré consejos prácticos para que tu cultivo sea exitoso y puedas tener céleri fresco, ecológico y sin tener que salir de casa. ¡Vamos allá!
¿Por qué cultivar tu propio céleri?
Antes de que empecemos con los detalles prácticos, quizás te preguntes: ¿Por qué debería dedicar tiempo y espacio a cultivar céleri? La respuesta es sencilla.
Primero, el céleri es una verdura muy saludable, llena de vitaminas, antioxidantes y fibra. Al cultivarlo en casa, tienes control total sobre su calidad, sin pesticidas ni conservantes. Además, el proceso de cultivo puede ser muy gratificante y divertido, incluso si no tienes experiencia previa en jardinería.
Otra de las ventajas es que, al tener tu propio céleri en casa, puedes cosechar solo la cantidad que necesitas, reduciendo desperdicios y asegurándote de comer siempre productos frescos y llenos de sabor. Además, si te gusta cocinar de manera más ecológica, esta es una opción perfecta para reducir tu huella ambiental, ¡y sin gastar mucho dinero en comprarlo constantemente!
¿Qué necesitas para empezar a cultivar céleri en casa?
Para comenzar, solo necesitas algunos materiales básicos y accesibles. Aquí te los detallo:
- Un recipiente con buen drenaje: puede ser una maceta, un cajón de madera o una jardinerita, siempre que tenga agujeros en la base para que el exceso de agua salga.
- Tierra de buena calidad: preferiblemente un suelo ligero, rico en nutrientes, que permita un buen desarrollo de las raíces y hojas.
- Una cabeza de céleri comprada en el supermercado o restos de una que ya hayas utilizado: ¡esto será tu punto de partida!
- Agua a temperatura ambiente: importante para evitar choques térmicos y favorecer un crecimiento rápido.
- Un lugar luminoso: preferiblemente en una ventana que reciba sol directo o indirecto varias horas al día.
Ahora que tienes claro qué necesitas, pasemos a los pasos para hacer crecer tu céleri en casa.
Primer paso: Preparar la raíz de céleri
El método más sencillo y efectivo para comenzar a cultivar céleri en casa consiste en aprovechar una cabeza que ya hayas comprado. Cuando elijas tu próxima compra en el supermercado, opta por una cabeza con una raíz bien desarrollada y sin signos de deterioro.
Una vez que la tengas, corta la parte inferior, aproximadamente 3 o 4 centímetros por encima de la base de la raíz. No tires esta parte, porque es justo la que te permitirá que vuelva a crecer.
Para estimular su crecimiento, coloca la raíz en un recipiente con agua, asegurándote de que la parte cortada quede sumergida en el agua, pero sin cubrir toda la raíz. La idea es que la parte inferior permanezca húmeda, pero sin encharcarse.
Coloca el recipiente en un lugar bien iluminado y cambia el agua cada dos días. Después de unos 7 a 14 días, deberías comenzar a ver pequeños brotes o nuevas hojas verdes. Esto indica que la raíz está activa y lista para ser plantada en tierra.
Segundo paso: Trasplantar la raíz en la maceta
Cuando observes los signos de crecimiento, es hora de pasar tu raíz al suelo. Llena tu maceta con tierra de buena calidad, ligera y bien drenada.

Haz un hoyo en el centro de la maceta, del tamaño apropiado para la raíz. Coloca la raíz en el hoyo, asegurándote de que la parte superior de la raíz quede ligeramente por encima del nivel del suelo. Esto ayuda a prevenir el encharcamiento en la base y favorece un buen desarrollo.
Cubre suavemente con tierra, presiona ligeramente y riega con abundancia para asentar la planta. Es preferible que la tierra esté húmeda, pero sin encharcarse, para evitar que la raíz se pudra.
Tercer paso: Cuidados básicos para tu céleri en maceta
Ahora que tu céleri está plantado, es importante brindarle los cuidados necesarios para que crezca saludable y fuerte.
- Luz: coloca la maceta en un lugar donde reciba al menos 4 a 6 horas diarias de sol, preferiblemente en una ventana orientada al sur si estás en el hemisferio norte, o en un lugar con buena exposición solar si tienes en el hemisferio sur.
- Riego: mantén siempre la tierra ligeramente húmeda, pero no encharcada. Es recomendable regar cuando la superficie de la tierra comience a secarse al tacto.
- Fertilización: una vez al mes, añade un fertilizante líquido rico en nitrógeno, que estimulará un crecimiento vigoroso y saludable de las hojas y raíces.
- Poda: a medida que el céleri crece, puedes cortar las puntas de las hojas más grandes, para favorecer la formación de nuevas ramas y mantener un tamaño manejable.
Cuánto tiempo tarda en crecer y cómo cosechar
La buena noticia es que, si sigues estos pasos y brindas los cuidados adecuados, en aproximadamente 3 a 4 meses podrás comenzar a cosechar tallos frescos y crujientes.
Para hacerlo, simplemente corta las hojas o tallos más gruesos y deja que la raíz siga creciendo si quieres obtener nuevas ramas. Con cada corte, el céleri puede seguir produciendo nuevas hojas en las próximas semanas, así que con un poco de paciencia, tendrás una fuente interminable de céleri fresco en casa.
Y si quieres ampliar aún más tu reserva, puedes repetir el proceso cortando la parte superior para que vuelva a brotar, o incluso intentar hacer nuevas plantas a partir de pequeñas raíces que puedas dividir.
Consejos útiles para que tengas éxito
- La paciencia es clave: el crecimiento puede parecer lento al principio, pero con regularidad y cuidado, notarás avances en pocas semanas.
- Usa siempre tierra bien drenada para evitar encharcamientos que pudieran pudrir la raíz.
- No olvides la iluminación: el céleri requiere sol para crecer fuerte y con buen sabor.
- Si notas que las hojas se vuelven amarillas o la raíz empieza a oler mal, revisa tus métodos de riego y asegúrate de que la planta no esté encharcada.
En resumen
Cultivar tu propio céleri en casa es una experiencia sencilla, económica y ecológica que te permite tener siempre en tu cocina ingredientes frescos, libres de químicos y a tu alcance. Solo necesitas un poco de paciencia, cuidado y los materiales correctos para comenzar a disfrutar de esta verdura tan versátil y saludable.
¿Listo para darle un giro a tu forma de consumir cebollas y verduras? Poner en marcha este proyecto en tu hogar puede ser la mejor decisión para tu alimentación y para cuidar del planeta. ¡Empieza hoy mismo, y pronto estarás cosechando tus propios tallos de céleri, llenos de sabor y frescura!