ELAGAGE: CÓMO HACER CORRECTAS LAS CORTES PARA CUIDAR TU ÁRBOL
El proceso de poda o elagado es una tarea fundamental para mantener tus árboles sanos, fuertes y con un aspecto armonioso. Sin embargo, no basta con simplemente cortar ramas al azar. Es crucial entender cómo realizar cortes adecuados que fomenten la cicatrización natural del árbol y eviten daños a largo plazo. Aquí te explicamos todo lo que necesitas saber para llevar a cabo un elagado efectivo, seguro y respetuoso con la naturaleza de tus árboles.
¿Por qué es importante el elagado correcto?
Un elagado bien hecho no solo mejora la estética del árbol, sino que también previene problemas estructurales, enfermedades y daños durante tormentas fuertes. Además, ayuda a mantener la seguridad en tu propiedad, evitando que ramas peligrosas puedan caer y causar accidentes.
Herramientas recomendadas para un elagado eficiente
Antes de empezar, es fundamental contar con las herramientas adecuadas para realizar cortes precisos y seguros.
- Tronçonneuse: Ideal para ramas grandes y de madera dura. Sirve para cortes vigorosos en ramas de gran diámetro, pero requiere manejo experto para evitar lesiones o daños al árbol.
- Sierra manual o a tige: Perfecta para ramas de entre 1 y 15 centímetros de diámetro. Es fácil de manejar y te permite tener un control preciso sobre los cortes.
- Cuchillos o tijeras de poda: Se utilizan para ramas menores a 1 centímetro. Permiten realizar cortes limpios y rápidos en ramitas y hojas pequeñas.
Es importante evitar el uso de tendedoras de setos o tronçonneuses de mano con inserciones en forma de tija**, porque no permiten hacer cortes precisos y pueden causar heridas abiertas en el árbol.
Consideraciones clave antes de podar
Antes de comenzar, realiza una observación minuciosa del árbol:
- Conoce bien la morfología de tu árbol, incluyendo sus ramas principales y puntos de unión.
- Respeta siempre el collar de la rama, esa zona ligeramente ensanchada en la base de la rama que conecta con el tronco o ramas principales. No cortes demasiado cerca del tronco para evitar dañarlo.
- Considera la temporada adecuada: la mayoría de los árboles se podan en invierno o principios de primavera, cuando están en reposo vegetativo.
Pasos para realizar un corte correcto
Para realizar una poda adecuada, debes seguir un proceso en tres fases:
1. Primera corte (de abajo hacia arriba):
Haz un corte en la parte inferior de la rama, aproximadamente a un tercio de su diámetro. Esto evita que la rama se quiebre de forma descontrolada y ayuda a reducir el peso sobre la estructura principal.
2. Segunda corte (de arriba hacia abajo):
Luego, realiza un segundo corte en la parte superior, un poco más lejos del apoyo inicial, para eliminar la mayor parte de la rama. Este doble corte previene que la rama caiga de golpe, protegiendo la corteza del árbol.
3. Tercera corte (eliminar el muñón o pasa):
Finalmente, limpia la unión dejando solo la parte del casquillo o collar, pero sin dañar la base de la rama. La idea es que quede una herida pequeña que facilite la cicatrización.
La cicatrización: cómo ayuda el árbol a sanar
Una vez realizadas las cortas correctas, el árbol empieza su proceso de cicatrización. Este proceso natural, llamado compartimentación, consiste en que el árbol forma barreras en la zona dañada para aislar la herida y evitar infectarse.
- Corte adecuado: Favorece cicatrización rápida y efectiva, reduciendo el riesgo de infecciones, hongos o plagas.
- Corte inadecuado: Puede dejar heridas abiertas, que se vuelven vulnerables a infecciones y pueden afectar la salud a largo plazo del árbol.
Es importante no realizar elagados excesivos o incorrectos para evitar estrés o debilitamiento en el árbol que pueda derivar en enfermedades o caída de ramas peligrosas en temporadas de viento.
¿Tienes dudas específicas sobre cómo podar un tipo particular de árbol o sobre las herramientas más seguras? Estoy aquí para ayudarte a cuidar tus árboles de la mejor manera posible y que luzcan sanos y hermosos durante muchos años.
