Farofa Brasileña con Linguiça: Receta Tradicional y Consejos para Servir
La farofa brasileña con linguiça es un acompañamiento típico de la cocina brasileña, especialmente presente en reuniones familiares, parrilladas y comidas festivas. Su textura ligeramente crujiente y su sabor ahumado la convierten en una guarnición versátil que combina con carnes, pollo, pescado o platos tradicionales como la feijoada. La base de esta preparación es la harina de mandioca, un ingrediente muy utilizado en América del Sur que aporta cuerpo y sabor al plato.
En este artículo se presenta una versión completa y detallada de la receta, junto con variaciones, consejos de preparación, información sobre los ingredientes y respuestas a preguntas frecuentes. El objetivo es ofrecer una guía clara y útil para quienes deseen preparar una farofa auténtica en casa.
La palabra clave principal es: farofa con linguiça.
Qué es la Farofa con Linguiça
La farofa con linguiça es un plato preparado a partir de harina de mandioca salteada en grasa o mantequilla, a la que se añaden ingredientes aromáticos como cebolla, ajo y hierbas frescas. La linguiça, una salchicha brasileña ahumada, aporta notas intensas y ligeramente especiadas. En ausencia de linguiça, puede utilizarse chorizo o salchicha ahumada, manteniendo un perfil similar.
Su textura es granulada y seca, pero nunca dura. La técnica principal consiste en tostar la harina de mandioca lentamente para que absorba los sabores sin quemarse.
Ingredientes para Preparar Farofa con Linguiça
- 200 g de harina de mandioca (también conocida como harina de yuca o mandioca tostada)
- 150 a 200 g de linguiça o chorizo ahumado, cortado en rodajas delgadas
- 1 cebolla mediana finamente picada
- 2 dientes de ajo picados
- 2 cucharadas de mantequilla o aceite de oliva
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
- Hierbas frescas como perejil o romero (opcional)
Estos ingredientes se encuentran fácilmente en la mayoría de los supermercados, aunque la harina de mandioca puede requerir una visita a una tienda especializada en productos latinoamericanos.
Cómo Preparar la Farofa con Linguiça
Paso 1: Preparar la linguiça
Cortar la salchicha en rodajas finas para favorecer una cocción pareja. Colocarla en una sartén grande a fuego medio y cocinar hasta que esté ligeramente dorada y haya liberado parte de su grasa. Retirar y reservar.
Paso 2: Sofreír los aromáticos
En la misma sartén, añadir la mantequilla o un poco de aceite. Agregar la cebolla y cocinar durante dos o tres minutos hasta que esté transparente. Incorporar el ajo y saltear brevemente sin dejar que se queme, para evitar sabores amargos.
Paso 3: Incorporar la harina de mandioca
Añadir la harina de mandioca poco a poco, removiendo de manera constante para que absorba la grasa y los aromas del sofrito. Continuar moviendo durante aproximadamente cuatro a ocho minutos, asegurando que la harina se tueste ligeramente y adquiera color sin quemarse.
Paso 4: Finalizar y sazonar
Reincorporar la linguiça a la sartén y mezclar bien para distribuirla de manera uniforme. Ajustar con sal y pimienta. Si se desea, añadir perejil o romero fresco picado antes de servir.

Variaciones y Adaptaciones
La farofa es un plato muy flexible, lo que permite múltiples interpretaciones según preferencias o ingredientes disponibles.
Con huevo
Agregar uno o dos huevos batidos después de sofreír la cebolla y antes de añadir la harina de mandioca. Cocinar hasta obtener huevos suaves y bien integrados.
Con vegetales
Se pueden incorporar zanahoria rallada, maíz cocido o pimientos en cubos pequeños para obtener una farofa más colorida y nutritiva.
Con frutos secos
Añadir nueces, castañas o almendras picadas aporta textura crujiente y profundidad de sabor. Esta variante es común en preparaciones navideñas.
Consejos para Lograr una Farofa Perfecta
- La harina debe agregarse gradualmente y mezclarse constantemente para evitar que se queme.
- Cocinar a fuego medio o bajo permite controlar mejor la textura.
- Ajustar la cantidad de grasa según la humedad deseada; la farofa nunca debe quedar demasiado seca.
- El uso de una sartén amplia facilita el tostado uniforme.
Cómo Servir la Farofa con Linguiça
Este acompañamiento combina especialmente bien con:
- Carnes a la parrilla
- Pollo al horno o a la brasa
- Pescado asado
- Feijoada u otros guisos tradicionales
La farofa se sirve generalmente caliente, aunque también puede disfrutarse tibia o a temperatura ambiente sin perder sabor ni textura.
Beneficios y Aspectos Nutricionales
La harina de mandioca es una fuente de carbohidratos complejos y no contiene gluten, lo cual la convierte en una alternativa adecuada para personas celíacas o con sensibilidad al gluten. Para obtener más información sobre la mandioca y su valor nutricional, puede consultarse la documentación disponible en la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Preguntas Frecuentes (FAQ)
¿Se puede usar otro tipo de harina en lugar de la de mandioca?
No se recomienda reemplazarla por harina de trigo o maíz, ya que la textura y el sabor característicos de la farofa dependen específicamente de la harina de mandioca.
¿La linguiça puede sustituirse por otro ingrediente?
Sí, es posible usar chorizo, salchicha ahumada o incluso tofu ahumado en caso de buscar una opción sin carne.
¿Es posible preparar esta receta sin mantequilla?
Puede utilizarse aceite vegetal, aceite de oliva o incluso manteca, según las preferencias de sabor y dieta.
¿Cuánto tiempo se conserva la farofa?
Se mantiene en buen estado en un recipiente hermético hasta dos días. Se puede recalentar en una sartén a fuego bajo.