Grados de quemaduras en la piel: guía completa para identificarlas y actuar de forma segura
Las quemaduras son lesiones cutáneas que pueden producirse por contacto con fuentes de calor, productos químicos, radiación o electricidad. Su gravedad varía según la profundidad del daño y la extensión de la piel afectada. Conocer los grados de quemaduras y cómo actuar ante cada uno es esencial para prevenir infecciones y favorecer una correcta recuperación.
Qué son las quemaduras y cómo se clasifican
Una quemadura es una lesión que afecta los tejidos de la piel y, en los casos más graves, también músculos, tendones o huesos. Se clasifican en cuatro grados principales, según la profundidad y el daño que ocasionan. Cada tipo requiere un tratamiento distinto y una atención específica.
Grado I: quemaduras superficiales
Las quemaduras de primer grado son las más leves. Afectan únicamente la capa externa de la piel, conocida como epidermis. Suelen provocar enrojecimiento, ardor y sensibilidad al tacto, pero sin ampollas.
Ejemplo común: una exposición prolongada al sol o un breve contacto con un líquido caliente.
Qué hacer
- Enfriar la zona afectada con agua a temperatura ambiente durante 10 a 15 minutos.
- Aplicar gel de aloe vera o una crema hidratante sin perfumes.
- Mantener la piel limpia y protegida con una gasa ligera.
Qué no hacer
- No colocar hielo directamente, ya que puede agravar la lesión.
- No aplicar mantequilla, aceites ni pasta dental.
Grado II: quemaduras parciales o intermedias
Este tipo de quemadura afecta tanto la epidermis como la parte superior de la dermis. Se caracteriza por la aparición de ampollas, dolor intenso, enrojecimiento y una superficie húmeda o brillante.
Qué hacer
- Lavar suavemente la zona con agua corriente fresca (no helada).
- Aplicar una crema con pantenol o gel de aloe vera puro.
- Cubrir con una gasa estéril sin ejercer presión.
- Tomar un analgésico si es necesario para aliviar el dolor.
Qué no hacer
- No reventar las ampollas, ya que esto puede causar infecciones.
- No aplicar remedios caseros como aceite, huevo o miel.
Grado III: quemaduras profundas
Estas lesiones son más graves, pues dañan todas las capas de la piel e incluso terminaciones nerviosas, por lo que el área puede perder sensibilidad. La piel puede verse blanquecina, oscura o carbonizada, y el dolor puede ser mínimo debido a la destrucción de los nervios.
Qué hacer
- Cubrir la zona con un paño o gasa limpia y seca.
- Acudir de inmediato a un centro médico o servicio de urgencias.
- Mantener a la persona tranquila e hidratada mientras llega la ayuda.
Qué no hacer
- No aplicar cremas, pomadas ni hielo.
- No intentar retirar tejidos ni ropa adherida a la piel.

Grado IV: quemaduras severas o totales
Este tipo de quemadura destruye todas las capas cutáneas y puede llegar a afectar músculos, tendones y huesos. Son potencialmente mortales y requieren atención médica urgente.
Qué hacer
- Llamar inmediatamente al servicio de emergencias (112 o 911).
- Cubrir la zona con un paño limpio y seco, sin aplicar ningún producto.
- Elevar la parte afectada si es posible para reducir la inflamación.
Qué no hacer
- No aplicar hielo ni ningún tipo de sustancia tópica.
- No retirar prendas pegadas a la piel.
- No ofrecer alimentos ni líquidos si la persona está inconsciente.
Consejos generales de prevención
Evitar una quemadura es siempre mejor que tratarla. Algunos hábitos simples pueden reducir significativamente el riesgo:
- Usar guantes térmicos o protectores al manipular líquidos o materiales calientes.
- Mantener los productos químicos fuera del alcance de niños y mascotas.
- No dejar velas encendidas o planchas conectadas sin supervisión.
- Enseñar a los niños a mantenerse alejados de la cocina y enchufes eléctricos.
- Tener siempre a mano un botiquín de primeros auxilios con gasas estériles, crema con pantenol y analgésicos básicos.
Cuándo acudir al médico
Busca atención médica inmediata si:
- La quemadura afecta una zona extensa del cuerpo.
- Está localizada en áreas sensibles como cara, manos, pies o genitales.
- Hay signos de infección, como pus, fiebre o mal olor.
- La persona presenta mareos o dificultad para respirar tras una quemadura por fuego o vapor.
Recuperación y cuidados posteriores
Durante la recuperación, es fundamental mantener la piel hidratada y protegida del sol. Las cicatrices pueden mejorar con el uso de cremas específicas recomendadas por el médico. Evita rascar la zona o retirar costras, ya que esto puede retrasar la curación.
Además, es recomendable consumir alimentos ricos en vitamina C, zinc y proteínas, que favorecen la regeneración de tejidos.
Preguntas frecuentes sobre quemaduras
- ¿Cuánto tiempo tarda en curarse una quemadura leve?
Una quemadura de primer grado suele sanar entre 3 y 7 días, mientras que las de segundo grado pueden tardar hasta 3 semanas, dependiendo del cuidado y la extensión. - ¿Puedo usar miel para tratar una quemadura?
Aunque la miel tiene propiedades antibacterianas, no se recomienda aplicarla directamente sin supervisión médica. Los tratamientos tópicos deben estar clínicamente aprobados. - ¿Qué crema es buena para las quemaduras domésticas?
Las cremas con aloe vera, pantenol o ácido hialurónico son opciones seguras para quemaduras leves. Evita productos con alcohol o fragancias. - ¿Cuándo se deben usar antibióticos?
Solo un médico puede prescribir antibióticos si hay riesgo de infección o la quemadura afecta capas profundas de la piel. - ¿Puedo exponer la zona al sol después de una quemadura?
No. Es importante proteger la piel del sol durante al menos tres meses tras la lesión para evitar manchas y daños permanentes.