NUNCA RECOJAS LAS HOJAS DE ALBAHACA DE ESTA FORMA: LAS MATA AL INSTANTE
El basilicón, también conocido como albahaca silvestre o de hoja grande, es una hierba aromática muy apreciada en la gastronomía y en la medicina natural. Con sus hojas brillantes y su aroma intenso, aportar frescura y sabor a muchos platos. Sin embargo, muchos no saben que la forma en que recolectan sus hojas puede marcar una gran diferencia entre tener una planta sana y productiva o que se marchite prematuramente.
En este artículo, te comparto los errores comunes al cosechar el basilicón y cómo hacerlo correctamente para que puedas disfrutar de su aroma y sabor en cada momento. También te doy consejos prácticos para su cultivo, poda y conservación, ¡todo para que tu planta siga creciendo fuerte y llena de vitalidad todo el año!
Cómo cultivar y cuidar tu basilicón en maceta o en tierra
El basilicón es una planta resistente y adaptable que puede crecer tanto en maceta como en tierra. Lo importante es ofrecerle las condiciones adecuadas para que se desarrolle y florezca.
Primero, aunque puede prosperar en ambos medios, debes protegerlo del frío, especialmente en invierno. La exposición a temperaturas muy bajas puede dañarla o incluso matarla, así que si estás en una zona donde las temperaturas bajan mucho, considera trasladarla a un lugar resguardado o dentro de casa durante los meses más fríos.
Durante la primavera y el verano, de abril a octubre, es el momento ideal para cosechar regularmente. Esto no solo ayuda a mantener la planta saludable, sino que también estimula el crecimiento de nuevas hojas, llenas de sabor y aroma.
La mejor manera de cosechar las hojas de basilicón
Muchas personas cometen un error frecuente: recoger las hojas de forma incorrecta, lo que puede dañar la planta o frenarla. La clave para una cosecha exitosa es respetar ciertos detalles importantes.
Primero, siempre recoge las hojas antes del mediodía. ¿Por qué? Porque en las horas de la mañana, después del rocío y con temperaturas más frescas, las hojas están en su punto máximo de frescura y sabor. Además, la planta todavía no ha comenzado a transpirar demasiado, por lo que conserva mejor su aroma.

Cuando el basilicón haya alcanzado unos 15 a 20 cm de altura, puedes comenzar a cosechar. Sin embargo, evita cortar la rama principal entera, ya que esto puede afectar su crecimiento.
Utiliza tijeras o unas pequeñas pinzas para cortar cerca de la base de la hoja, justo por encima de un nudo de hojas. Así, favoreces que surjan nuevas hojas en la parte superior y tu planta siga creciendo vigorosa.
Cómo podar y estimular un crecimiento abundante
La poda regular es fundamental para mantener el basilicón con un aspecto denso y lleno de hojas.
Primer paso: recorta los tallos superiores, pero sin superar un tercio de la altura total de la planta. Siempre haz el corte justo por encima de un nudo de hojas; esto estimula el crecimiento de nuevos tallos laterales y evita que la planta se vuelva demasiado delgada o larga.
Además, puedes pinzar los brotes laterales que aparezcan en los tallos principales. Esto ayuda a controlar el tamaño y fomenta que la planta se vuelva más tupida y llena de hojas grandes y aromáticas.
Cómo conservar tu basilicón para disfrutarlo todo el año
No solo basta con cultivar y cosechar, también es importante saber cómo conservar esta hierba para que mantenga su aroma y sabor en el tiempo.
Antes de guardar las hojas, lávalas bien en agua fría y sécalas con cuidado utilizando un paño limpio o una centrifugadora de ensaladas.
Para uso inmediato, puedes colocarlas en bolsas plásticas o en recipientes herméticos en el refrigerador. Para una conservación más prolongada, congela las hojas picadas en cubitos de hielo o cuélgalas en racimos y déjalas secar al aire en un lugar seco y ventilado.
¿Quieres preparar algo delicioso? El pesto es una excelente opción: mezcla hojas de basilicón con ajo, aceite de oliva, un poco de sal y piñones o nueces. Puedes usarlo inmediatamente o congelarlo en