PODA TU HIGUERA: PASO A PASO
La poda de una higuera es uno de los cuidados más importantes que puedes realizar para mantenerla sana, fuerte y productiva. Con el método correcto, no solo mejorarás su aspecto, sino que también incentivarás una cosecha abundante y de calidad. Aunque muchas personas piensan que podar es solo cortar, en realidad es un proceso delicado que requiere atención y técnica. Aquí te dejo una guía paso a paso para que puedas podar tu higuera de manera efectiva y segura.
1. Elimina las ramas muertas o enfermas
El primer paso para cuidar tu higuera es revisar cuidadosamente sus ramas. Identifica las que están secas, rotas o con signos de enfermedades, como manchas oscuras o moho. Estas ramas no solo afectan la estética del árbol, sino que también pueden ser un foco de infección.
Eliminar las ramas muertas o enfermas ayuda a prevenir que las enfermedades se propaguen y favorece el crecimiento de nuevas estructuras saludables. Usa herramientas afiladas y limpias para hacer cortes precisos y evitar dañar el resto del árbol.
¿Con qué frecuencia debes hacer esto? Lo ideal es revisar tu higuera a principios de cada temporada de crecimiento, generalmente en invierno o principios de primavera, antes de que comience un nuevo ciclo de fruto.
2. Recorta las ramas largas para dar forma a la copa
Luego, enfócate en las ramas que están demasiado largas o que crecen en direcciones no deseadas. Recortar estas ramas ayuda a dar forma a la copa de la higuera, controlando su tamaño y promoviéndo una estructura más fuerte.
Al hacer estos cortes, también favoreces que la luz y el aire puedan penetrar mejor en toda la estructura del árbol, lo cual es fundamental para la producción de frutos de calidad. Intenta mantener una forma equilibrada, con ramas que permitan un crecimiento uniforme y sostenible.
No olvides que una poda correcta no debe ser excesiva; quitar solo lo necesario permitirá que la higuera florezca con fuerzas renovadas.
3. Realiza cortes verticales para mejorar el drenaje
Un paso a menudo pasado por alto, pero muy importante, es realizar cortes en las ramas o ramas que estén en posición vertical o que puedan acumular agua. Esto ayuda a mejorar el drenaje del árbol y previene la acumulación de humedad, que puede provocar enfermedades o podredumbre.
Al hacer estos cortes, también estás favoreciendo la circulación interna de la copa, lo cual es esencial para mantener el árbol en óptimas condiciones de salud. Usa herramientas limpias y afiladas para un acabado limpio y evitar heridas abiertas que puedan infectarse.
Este tipo de poda debe hacerse con cuidado, asegurando que los cortes sean en ángulo para facilitar la cicatrización natural del árbol.
4. Desinfecta las herramientas antes y después de podar
La higiene es fundamental para prevenir la propagación de enfermedades. Antes de comenzar, desinfecta todas tus herramientas con alcohol, alcohol isopropílico o una solución de cloro diluido en agua.
Una vez que termines, vuelve a desinfectar las herramientas para eliminar cualquier residuo de savia, virus o bacterias que puedan haberse quedado en ellas.
Este paso puede parecer simple, pero marcará la diferencia en la salud de tu higuera y en la calidad de la cosecha futura. Además, prolonga la vida útil de tus herramientas y mantiene un ambiente de trabajo limpio y seguro.
5. Cuidados adicionales: fertilización, riego y protección en invierno
Después de la poda, tu higuera necesita cuidados complementarios que aseguren un crecimiento fuerte y una buena producción de frutos.
Fertiliza con nutrientes específicos para higueras, en particular aquellos ricos en potasio y fósforo. Esos ayudarán a fortalecer las ramas y mejorar la calidad de los frutos.
Riega con regularidad, especialmente en temporadas de sequía, pero sin exceso. La clave está en mantener el suelo húmedo pero no encharcado, para evitar que las raíces se pudran.
Protege tu árbol durante el invierno, si vives en zonas frías. Utiliza telas de protección, mantillos o cobertores para que las raíces y el tronco no se vean afectados por bajas temperaturas.
6. Mantén estos cuidados para cosechas abundantes
El éxito de una higuera no solo radica en podarla correctamente, sino en mantener una rutina constante de cuidados a lo largo de todo el ciclo anual. Riega, fertiliza, limpia y protege con dedicación para que el árbol se fortalezca y produzca frutos en cantidad y calidad.
Con el tiempo, notarás cómo tu higuera se transforma en
